Las amenazas de seguridad para las empresas no siempre provienen de ciberdelincuentes externos. En realidad, muchas brechas de seguridad son resultado de acciones internas cometidas por administradores “de hecho” o “de derecho” lo que daría lugar al delito de administración desleal, o por socios (delitos societarios) o por terceros (delito de apropiación indebida). Incluso los errores no intencionados pueden conllevar la imputación por delito de blanqueo de capitales si se usan las cuentas con saldos provenientes de un ilícito penal, siendo este uno de los tipos en los que cabe su comisión por imprudencia.

Suelen ser el precedente o el contingente de delitos de extorsión o chantaje, exigiendo el pago de determinadas cantidades, bien en dinero, bien mediante ingresos en billeteras de bitcoins, para poder acceder al contenido de nuestros discos duros y programas.

Es actualmente uno de los más usados, consiste en clonar la página del banco y solicitar al usuario que clicke en el enlace que se le facilita para para cambiar su número pin y evitar que unos hackers accedan a sus cuentas. Al cambiar el PIN facilitamos nuestro número secreto al hacker que acto seguido vacia las cuentas. Es la estafa informática propiamente dicha. Una nueva modalidad es enviar un sms o WhatsApp diciendo que soy tu hija/o, luego te lo explico con calma, es una emergencia, no me llames al móvil porque lo tengo inoperante, por eso te llamo desde este número, envíame urgente una transferencia de dinero, que acto seguido se vuelve a reclamar solicitando que se haga vía directa a través del Banco de España.

Otra modalidad de estafa es acceder al correo electrónico de la víctima, entrar en la factura pdf que esta remite al cliente, y modificar el número IBAN que aparece en la misma, para inmediatamente volver a poner en circulación dicho correo electrónico. El cliente efectúa el ingreso en la cuenta de IBAN modificada por el hacker, con el consiguiente perjuicio patrimonial. Una variante es ofrecer al cliente la posibilidad de enriquecerse mediante operaciones de trading, facilitando una primera operación por importe de 250€ o cantidad similar que otorga unos beneficios de 30€, se solicita del cliente que realice ingresos más altos con el fin de obtener mayor porcentaje de beneficios. Estos ingresos siempre son contra plataformas abiertas en internet como BINANCE o similares o billeteras de bitcoins u otras criptomonedas. A menudo se realizan ingresos en la cuenta del cliente en concepto de supuestos beneficios que pueden comportar la posterior acusación por un delito de blanqueo de capitales.

La revelación de secretos empresariales es otro delito que afecta a muchas organizaciones. La divulgación de información confidencial puede dar ventaja a la competencia o perjudicar la operación de la empresa. Los delitos que se derivan de estas modalidades delictivas son delitos de revelación de secretos o delitos contra la propiedad intelectual o industrial.